JUAN MANUEL SANTOS llega a la Argentina como parte de una serie de visitas protocolarias programadas antes de posesionarse como presidente de la república de Colombia en agosto. Se engalana con su mejor corbata, se rodea de sus más fieles funcionarios y lo escoltan sus mejores agentes; todos luciendo ese aire de solemnidad prepotente que los caracteriza: saludan a la gente y a las cámaras como si nada pasara, como si todo transcurriera normalmente. Pero no es así porque la llegada a la presidencia de este personaje está signada por escándalos sucesivos de fraude, corrupción y violaciones flagrantes de derechos humanos en Colombia.
Gracias a que son dueños de los principales medios de comunicación, la familia SANTOS ha ocupado una posición dominante en la política colombiana desde que Eduardo Santos Montejo compró el periódico El Tiempo en 1913 para luego llegar a ser presidente en 1938. Desde entonces los miembros de esa familia han sido funcionarios de diferentes gobiernos a cambio de su favoritismo como “opinión pública”. Dentro del gobierno de Uribe Vélez la familia Santos ocupó varios cargos, entre los que se encuentran el ministerio de Medio Ambiente, Relaciones Exteriores, Defensa (con Juan Manuel Santos) y en la Vicepresidencia (con Francisco Santos).
¿QUIEN ES JUAN MANUEL SANTOS?
En su carrera política ocupó el cargo de Ministro de Comercio Exterior durante el gobierno de César Gaviria para llevar a cabo la apertura neoliberal de los años 90; impulsó la iniciativa de crear una zona de distensión para negociar con las guerrillas durante el gobierno de Andrés Pastrana y luego se convirtió en un gran colaborador del gobierno de Uribe que llegó a la presidencia criticando dicha zona de distensión.
En el 2005 SANTOS se retiró del tradicional Partido Liberal para crear el Partido de la U que conglomera a todos los Uribistas y a la mayoría de los congresistas que hoy están siendo investigados por sus nexos con bandas de paramilitares (asesinos de ultra derecha) y narcotraficantes. Recientemente el Partido Liberal ratificó su apoyo a SANTOS como presidente electo por el Partido de la U. El pasado 20 de julio, dicha coalición de gobierno nombró como presidente del congreso de la república a un personaje investigado por sus nexos con los paramiliates. Actualmente más del 40% de los congresistas colombianos (todos uribistas) son investigados por dichos pactos con grupos narcoparamilitares que les garantizaron los votos necesarios para ganar las elecciones.
La candidatura de SANTOS a la presidencia se catapultó gracias al protagonismo mediático que tuvieron las operaciones militares que “dirigió” durante su gestión como Ministro de Defensa, entre las que se cuentan la invasión a Ecuador para bombardear un campamento guerrillero y un rescate militar en el que usaron sin autorización el logo de la Cruz Roja internacional y TeleSur. Hoy se sabe que dichas operaciones y otras tantas contaron con el apoyo directo del ejército norteamericano y el MOSSAD (Servicio de Inteligencia del Sionismo).
SANTOS también fue conocido por ser el impulsor del sistema de “incentivos” para las fuerzas militares, por medio del cual se pagaba bonificaciones jugosas y asensos militares por cada guerrillero muerto; lo que condujo a que los altos mandos militares ordenaran a sus soldados secuestrar jóvenes pobres de la ciudad para asesinarlos en el campo y presentarlos como guerrilleros muertos con montajes ridículos. Es lo que se conoce como “falsos positivos”. La ONU cifra en 1.800 los 'falsos positivos' del Ejército colombiano en el año 2009, hoy día esta cifra sobrepasa los 2.400 jóvenes desaparecidos y asesinados.
Uribe vuelve a provocar una crisis diplomática con Venezuela tras acusar al vecino país de alojar a la guerrilla (con supuestas pruebas presentadas ante la OEA por el embajador Luis Hoyos que está inhabilitado para desempeñar cargos públicos en Colombia por hallarse culpable en un caso de corrupción) y Santos inicia una gira internacional para tratar de “resolver” el conflicto aunque todos sabemos que él celebró el golpe de estado contra el Gobierno Bolivariano de Venezuela en el 2002 y el de Honduras en el 2009; también sabemos que fue quién ordenó invadir militarmente Ecuador en el 2008.
Denunciamos a Uribe y a todos sus funcionarios, entre ellos JUAN MANUEL SANTOS ahora presidente de la república, no solo porque durante su gobierno se feriaron nuestros recursos naturales a precios ridículos y se deterioró nuestra economía con el incremento incesante del desempleo, la inflación y el déficit de la cuenta corriente; sino también por todos los crímenes de lesa humanidad cometidos contra el pueblo colombiano con el objetivo supuesto de “pacificar” la nación; con el objetivo real de garantizar la concentración de la riqueza y la tierra a costa del sometimiento, asesinato y desplazamiento de trabajadores y campesinos.
Mientras a nivel internacional los medios masivos de comunicación cubren la decisión del presidente de la Republica Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, de romper relaciones con el Gobierno Colombiano, que se muestra como victima, no se menciona que la semana pasada un grupo de políticos opositores colombianos y de eurodiputados comprobaron la existencia de una fosa común con más de 2.000 cuerpos de campesinos sin identificar a pocos kilómetros de una base militar en la región de la Macarena; la fosa común más grande de América Latina en el país que registra desde lo años 90 el mayor número de sindicalistas muertos en el mundo con un registro máximo histórico en el año 2006 cuando el 80% de los sindicalistas muertos del mundo fueron colombianos.
La mal llamada “seguridad democrática” de Uribe encarnada en Juan Manuel Santos sumergió nuestro país en una guerra agudizada que arroja ya un salto total de 4.600.000 desplazados internos, 6 millones de colombianos fuera del país, 30 mil muertos por razones políticas en tan solo 8 años mientras los ricos se hacen más ricos: lo cuál les ha garantizado la simpatía de los empresarios, los medios de comunicación y el gobierno norteamericano.
Consideramos que para logra una Colombia con una verdadera democracia, con justicia social y garante de los derechos plenos para ciudadanía, debe haber un gobierno que sea legitimo, que haga respetar la soberanía nacional y no permita la instalación de 7 bases militares gringas, que viabilice la solución política al conflicto social y armado, que empieza a tener repercusiones en la dinámica política y económica latinoamericana y que contribuya definitivamente para la integración de las republicas latinoamericanas.
…NO QUEREMOS GOBIERNOS ILEGÍTIMOS, LACAYOS DEL IMPERIALISMO…
… EL SILENCIO COMPLICE Y COBARDE NO ES ALTERNATIVA …
…POR LA INTEGRACIÓN DE LOS PUEBLOS LATINOAMERICANOS LA PATRIA GRANDE Y EL SOCIALISMO, FUERA GRINGOS DE COLOMBIA Y DE AMERICA LATINA…
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